La resolución de problemas complejos, pensamiento crítico, creatividad, gestión de personas, coordinación con otros, inteligencia emocional, juicio y toma de decisiones, orientación de servicio, negociación, flexibilidad cognitiva, son algunas de ellas.
“La pandemia de Covid-19 ha impactado de forma negativa en las emociones de las personas”, señaló Rosa Osorio Morales, en el webinar organizado por la unidad de Educación Ejecutiva (UEJecutivos) de la FEN U. de Chile Cambio en el perfil profesional: ¿Cuáles son las habilidades más requeridas post pandemia?
Sobre exigencia emocional y desafíos adaptativos; cambio en las prioridades de las organizaciones; el imprescindible uso de la tecnología y digitalización; aparición de nuevos modelos de trabajo y formas de vida; liderazgo ad hoc para tiempos de crisis y contingencias que hacen necesario que los líderes posean nuevas competencias; y el cambio en el perfil y competencias de los trabajadores, entre otros, son algunos factores que han afectado a las personas y organizaciones, explicó la académica.
Otro elemento que se suma a los cambios que están experimentando es el contexto en el que estamos inmersos, caracterizado por un entorno BANI, sigla que refleja un ambiente con momentos quebradizos, ansiosos, no lineales e incomprensibles, el cual exige de los profesionales nuevas competencias de liderazgo que les permita una mayor adaptación a los cambios y apropiación de la disrupción. En este caso, los líderes deben considerar contar con un nivel mayor de empatía, más confianza y menor control, más resiliencia, mayor engagement, y mayor agilidad.
Sostuvo que en este escenario las organizaciones deben contar con un ambiente que proporcione seguridad sicológica. Este elemento es considerado frágil y vital en entornos BANI, pero es muy común en los equipos que obtienen desempeños más altos, pues otorga una mayor tranquilidad a los trabajadores que no recibirán castigo ante un error, permitiendo que asuman más riesgos calculados y sean innovadores, dándole más importancia a las emociones positivas, explicó. Por lo mismo, su aplicación será clave en la adaptación a la nueva normalidad.
“La calidad del ambiente y clima laboral puede ser un factor decisivo de ausentismo o incluso, de renuncia”, añadió.
Por ello, puso énfasis en que el principal reto organizacional en tiempos de crisis consiste en desarrollar la resiliencia, que no es más que “la capacidad para aprender de la adversidad y salir fortalecidas, con más recursos para superar las próximas crisis. Implica un cambio de valores, cultura”.
Habilidades
Contar con más recursos y herramientas será clave, para poder adaptarse a este entorno cambiante. Para ello, la académica comentó que se deben desarrollar las denominadas habilidades blandas “que son los hábitos personales que dan forman a la manera en la que trabaja una persona, tanto de manera individual como en equipo” y habilidades duras “que son los conocimientos técnicos o habilidades que has ganado a través de cualquier experiencia en la vida, incluyendo tu carrera o educación”.
“El 75% del éxito laboral depende del desarrollo de este tipo de destrezas”, enfatizó.
En este periodo, las habilidades requeridas se asocian a la resolución de problemas complejos, pensamiento crítico, creatividad, gestión de personas, coordinación con otros, inteligencia emocional, juicio y toma de decisiones, orientación de servicio, negociación, flexibilidad cognitiva, explicó.
Sin embargo, hacia 2025 “la mitad de los empleados tendrán que volver a formarse en los próximos tres años”, aseveró.
Y agregó que “85 millones de puestos de trabajo podrían ser desplazados por un cambio en la división del trabajo entre los humanos y las máquinas, pudiendo surgir aún más empleos -97 millones- que se adapten mejor a la nueva división del trabajo entre humanos, máquinas y algoritmos”.
Por ello, puso énfasis que al 2025, además de las habilidades antes mencionadas, el Foro Económico Mundial dice que las habilidades que los empleadores van a requerir de los profesionales se asocian al pensamiento analítico e innovación, aprendizaje activo y estrategias de aprendizaje, liderazgo e influencia social, uso de tecnología, monitoreo y control, diseño y programación de tecnología, resiliencia, tolerancia al estrés y flexibilidad, razonamiento, resolución de problemas e ideación.
Equipo Prensa
Portal Innova
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