Enero 2025 –Con la llegada del verano, las altas temperaturas y el incremento de la actividad industrial plantean importantes desafíos para mantener operaciones seguras y eficientes. En este contexto, la planificación estratégica y el mantenimiento preventivo se consolidan como herramientas esenciales para evitar fallas críticas, reducir costos y garantizar la continuidad operativa.
Según cifras de la International Energy Agency (IEA), implementar estrategias de eficiencia energética puede generar ahorros de hasta un 30% en el consumo energético, mientras que el Reporte de Seguridad Operacional 2024 del Sistema Eléctrico Nacional revela que las empresas que aplican planes de seguridad preventiva logran disminuir en un 25% los riesgos asociados a fallos operativos. Estas cifras destacan la relevancia de anticiparse a los problemas y actuar de manera proactiva durante esta temporada.
Una adecuada gestión de la eficiencia energética permite optimizar sistemas de climatización, iluminación y consumo de equipos críticos, reduciendo costos operativos y el impacto ambiental. Asimismo, capacitar al personal en protocolos de seguridad y en el uso eficiente de recursos mejora significativamente la respuesta ante situaciones críticas y reduce los riesgos operacionales. Además, implementar programas de mantenimiento preventivo enfocados en sistemas eléctricos y de climatización asegura la continuidad de las operaciones al identificar problemas antes de que se conviertan en emergencias.
Otro aspecto clave es la calidad del aire interior, especialmente en espacios cerrados. Garantizar un ambiente saludable mediante controles de ventilación y sistemas de filtrado contribuye al bienestar y la productividad de los colaboradores. Por último, en un contexto de creciente escasez hídrica, adoptar tecnologías eficientes y detectar fugas oportunamente son medidas esenciales para reducir el consumo de agua y optimizar su uso.
A nivel estratégico, las auditorías energéticas permiten identificar oportunidades de mejora en el consumo, mientras que la incorporación de sistemas inteligentes basados en IoT facilita el monitoreo en tiempo real de equipos e instalaciones, anticipando posibles fallos. Estas acciones no solo mitigan riesgos, sino que también fortalecen la sostenibilidad y la resiliencia operativa.
Daniel Riveros Apes, director de Facility Services de Grupo EULEN Chile, explica:
«Las empresas que invierten en mantenimiento preventivo y estrategias sostenibles no solo protegen sus activos, sino que también aseguran la eficiencia y seguridad en períodos críticos como el verano.»
Adoptar un enfoque preventivo y sostenible durante el verano no solo permite enfrentar los retos propios de la temporada, sino que también asegura operaciones fluidas y un entorno seguro y eficiente para todos los involucrados.
Equipo Prensa
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