- El término “sostenibilidad” en el área económica cada día es más escuchado y adquiere mayor relevancia por distintas razones en las empresas y pymes del país. Es así, como según el estudio Adaptación y Mitigación Del Cambio Climático en las Empresas Chilenas 2023 realizado por CORFO el 50,9% de las empresas nacionales declaran que han tomado medidas de adaptación al cambio climático en los últimos 7 años. ¿La razón? El 42,8% de las empresas chilenas han sufrido de fenómenos meteorológicos que han tenido un impacto negativo en su negocio en los últimos 7 años, lo que por supuesto, también ha hecho que tomen conciencia del desafío e importancia de ser sostenibles para disminuir estos fenómenos.
Hoy no se entiende que una empresa no nazca con un foco sostenible, es decir, que la empresa además de generar una rentabilidad financiera, cree valor ambiental, social y económico a medio y largo plazo, contribuyendo así al progreso y al bienestar de las comunidades donde operan y de las generaciones futuras. Éstas impactan en la vida de más de 3,5 millones de personas y sus respectivas familias, por ende la relevancia de generar valor ambiental y social no sólo queda suscrita a la existencia de la misma pyme, sino que conlleva una responsabilidad que escapa de sus fronteras. Hoy tenemos pequeñas y medianas empresas que se están viendo afectadas por los efectos del cambio climático o de condiciones climáticas adversas y poco predecibles de manera natural
¿Qué deben hacer las pymes este 2024 para ser sostenibles?
Las recomendaciones de organismos internacionales han apuntado a que, para mejorar la productividad de manera sostenible se requiere avanzar por la vía de la adopción tecnológica que ayude a maximizar y reorientar los recursos disponibles en el país. Dado lo anterior, esta adopción tecnológica permitirá no solamente que las pymes mejoren su desempeño a nivel productivo, sino que puedan producir de forma más sostenible y equitativa. Sin embargo, las empresas chilenas presentan bajos niveles de adopción de tecnologías para la modernización de sus procesos productivos, debido a la escasa capacidad de absorción de éstas.
Hoy es posible adoptar tecnología para que además de resolver un problema de negocio, puedas modernizar procesos productivos, reducir consumo de agua, disminuir operaciones y con ello tener un modelo de negocios más sostenible. No existe un área o tipo de pyme que tenga un mayor futuro en cuanto a sostenibilidad, sino que son empresarios y empresarias que tiene la oportunidad de asumir este desafío y con ello adaptarse a los cambios sociales y ambientales sin descuidar una rentabilidad financiera. Finalmente, lo que se propone no es que dejen de ser rentables financieramente a costa de un beneficio ambiental o social, más bien que se vea de manera íntegra sin descuidar ninguna de las tres áreas
Hay muchas acciones que pueden hacer las empresas para día a día ser más sostenibles, no es un estado binario es más bien un proceso que implica la incorporación de prácticas recurrentes en las propias organizaciones. Entre ellas se destacan:
1.- Aumentar la eficiencia en el uso del agua, reducir las emisiones y el impacto medioambiental de la empresa.
2.- Incorporar el uso de energía fotovoltaica.
3.- Incorporar soluciones tecnológicas, tanto que la administración tenga componentes digitales y se disminuya el uso de papel como preocuparse de medir y disminuir la huella de carbono.
Sin duda, es un camino largo de recorrer, pero es esencial para las Pymes ser sostenibles, no sólo por un tema responsabilidad social y ambiental, sino por múltiples razones, pero llevándolo a un caso práctico, hace 2 semanas un empresario de viñas de nuestra región nos dice si al 2025 no demuestro que mis emisiones de gases de efecto invernadero (huella de carbono, por ejemplo) son neutrales o negativas no podré vender mis productos en Europa, lo cual le traerá efectos económicos directamente, ya que su producto deberá ser vendido en mercados menos exigentes pero que también pagan menos.
Esto es una transición y hoy la digitalización permite implementar tecnología que al final del día se traduce en reducir costos y ser más eficiente. Las empresas deben iniciar un proceso de redistribución presupuestaria y ello debe ir acompañado de una política pública que incentive la inversión con foco en sostenibilidad, como por ejemplo, equipos y máquinas más eficientes y menos contaminantes. Es necesario buscar nuevas formas de desarrollo, explorando modelos que nos permitan disminuir el uso de recursos finitos, enfrentando las consecuencias del cambio climático de la mano de la industria 4.0 que por cierto, puede permitir evitar la pérdida de valor de los productos y la reducción de los desechos.
Escrita por: Manuel Hidalgo, director de la Red de Asistencia Digital Fortalece Pyme La Araucanía
Equipo Prensa
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