Visa relanza su marca con campaña global
La evolución de la marca a lo largo de varios años destaca el poder de la confiable red global de Visa, dando forma al movimiento moderno del dinero, expandiendo el acceso y el desarrollo económico
Con una campaña global de difusión de MKT, Visa está relanzando su marca con el propósito de destacar las diversas capacidades de su potente red y compromiso para facilitar la inclusión económica. Denominada ConoceVisa, la iniciativa está en sintonía con la estrategia de negocios de la compañía como empresa de tecnología de medios de pagos digitales. La campaña incluye un adelanto de la imagen modernizada de la icónica marca Visa.
Aunque la compañía sigue posibilitando transacciones físicas y digitales con tarjetas, también se está situando cada vez más en el mismo centro de facilitar el movimiento del dinero.
La red de Visa conecta 3.600 millones de credenciales de usuarios con más de 70 millones de puntos de venta y decenas de miles de socios, generando un volumen total de actividad de más de 11 billones (millones de millones) de dólares al año.
Cuando se fundó Visa hace más de sesenta años, pocos podían imaginar un mundo más allá del efectivo y los cheques. La visión de los fundadores de introducir una moneda más segura, confiable y conveniente en forma digital comenzó con una simple pregunta: ¿qué pasaría si el dinero se volviera totalmente electrónico? Hoy en día, la compañía continúa a la vanguardia del futuro del comercio digital, proporcionando acceso por medio de su red global y segura que funciona para todos, en todos lados.
“Las personas creen que ‘conocen’ a Visa. Los consumidores y las empresas confían en el poder de esas cuatro letras y las ven cuando abren su billetera, pagan a un proveedor, entran en una tienda o hacen un pedido por Internet. Lo que no ven es cómo esas cuatro letras hacen funcionar la red más dinámica de personas, alianzas y productos”, dijo Lynne Biggar, vicepresidenta ejecutiva y líder mundial de marketing de Visa.
Aunque la compañía sigue posibilitando transacciones físicas y digitales con tarjetas de crédito o débito, también se está situando cada vez más en el mismo centro de facilitar el movimiento del dinero.
La red de Visa, una compañía construida sobre acceso a la inclusión económica, conecta 3.600 millones de credenciales de usuarios con más de 70 millones de puntos de venta y decenas de miles de socios, generando un volumen total de actividad de más de 11 billones (millones de millones) de dólares al año.
Solamente en los últimos cinco años, la compañía ha invertido 9.000 millones de dólares en tecnología para moldear el futuro del comercio, ofrecer un conjunto diferenciado de productos, servicios y beneficios.[1] La red ayuda a que un trabajador de la economía naranja tenga la flexibilidad de recibir pagos en tiempo real, facilita los pagos de persona a persona para que se puedan enviar y recibir dinero entre miles de millones de tarjetas y cuentas en todo el mundo, y facilita la realización de pagos corporativos de alto valor entre países, por nombrar algunos ejemplos.
Equipo Prensa
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