Desde su implementación en 2010, los Tribunales Tributarios fueron instalándose gradualmente a lo largo del país. Hoy existen 18, cuatro en la Región Metropolitana y uno en las ciudades de Arica, Iquique, Antofagasta, Copiapó, La Serena, Valparaíso, Rancagua, Talca, Concepción, Temuco, Valdivia, Puerto Montt, Coyhaique y Punta Arenas. Su objetivo, generar una instancia imparcial que resuelva los conflictos entre particulares y el Fisco, evitando que el SII y Aduanas ejercieran como juez y parte. Con este cambio que modernizó la justicia tributaria, se crearon tribunales independientes, sujetos a la supervigilancia de la Corte Suprema y no del Servicio de Impuestos Internos (SII) y del Servicio Nacional de Aduanas, como era antes.
Sus funcionarios, con dedicación exclusiva, cuentan con conocimientos especializados y experiencia en materias tributarias o aduaneras, lo que garantiza a los contribuyentes el mantener una institucionalidad independiente y especializada.
“Hoy nos hemos enterado que un grupo de Convencionales ha presentado una indicación sustitutiva del artículo 48 transitorio, rechazada en el Pleno, que repone la idea de fusionar a los Tribunales Tributarios y Aduaneros, junto con otros Tribunales, en los Tribunales Administrativos, lo cual a todas luces significa volver a revivir el fantasma de la fusión haciendo perder la especialidad. Farías explica que el artículo transitorio, recientemente rechazado por el Pleno, establecía que “Los Tribunales Tributarios y Aduaneros, Tribunal de Cuentas, Juzgado de Cuentas, Tribunal de Contratación Pública y Tribunal de Propiedad Industrial, pasan de inmediato a integrar el Sistema Nacional de Justicia y en el orden de los tribunales administrativos, conservando su especialidad competencial y sus procedimientos especiales; sin perjuicio de lo que disponga la legislación de enjuiciamiento ulterior que se dicte. El funcionamiento de estos tribunales administrativos especiales será unipersonal o colegiado según corresponda y su incorporación a los tribunales administrativos, deberá conservar esta estructura de funcionamiento. Esta redacción, nos parecía que resguardaba la especialidad de los Tribunales Tributarios y Aduaneros y establecía un reconocimiento a su carácter de tribunales administrativos, pero especiales.
Así se refiere, Hernán Farías, abogado, presidente Asociación Nacional de Magistrados Tributarios y Aduaneros, ANMTTACH, al escenario aque vislumbran frente a los cambios que la CC propone para los TTA.
“Como Asociación Nacional de Magistrados de los Tribunales Tributarios y Aduaneros (ANMTTACH), nos parece que el rechazo de los Convencionales a nuestras sugerencias de resguardar el carácter de los TTA como tribunales especiales dentro del nuevo Sistema de Justicia, compromete gravemente el derecho a una justicia de calidad y oportuna. Como país, estamos perdiendo una gran oportunidad de mantener la justicia tributaria como una institucionalidad moderna y acorde a los tiempos, y a los requerimientos de quienes litigan contra el Fisco, desaprovechando la experiencia que los TTA han adquirido desde su implementación en 2010, en beneficio de una justicia que requiere un conocimiento especializado y en permanente actualización. Ahora vemos con estupor cómo se pretende desandar el avance que habíamos observado en la propuesta de norma transitoria rechazada en el Pleno, para luego volver a insistir en la fusión. No entendemos cuales son las razones de fondo, ni lo que se busca con destruir nuestra institucionalidad, ya que como lo hemos dicho y reiterado en todos los ámbitos en que hemos sido consultados, esto implica un grave retroceso en materia de justicia tributaria, después de tantos años. Y finalmente, creemos que es un entorpecimiento para el acceso de la ciudadanía a una justicia especializada que pueda resolver los conflictos tributarios y aduaneros sometidos a su decisión”.
Farías, destaca que esta no es sólo la opinión del gremio, sino también, la que han manifestado actores del mundo académico, privado y gremial. “Consideramos que es un retroceso importante en el diseño de una justicia para todos, que no solo pretende unificar los procedimientos y dar garantías de acceso a todos los ciudadanos en el nuevo sistema nacional de justicia, sino que se desperdicia la oportunidad de conformar una justicia que resuelva los conflictos desde la especialidad y con tribunales dedicados únicamente a resolver asuntos de naturaleza tributaria y aduanera, que, por lo demás, son extremadamente complejos”, concluyó.
Equipo Prensa
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