- La salud mental en los últimos años se ha afectado por acontecimientos desestabilizadores como el COVID-19, el aislamiento, la crisis económica, la incertidumbre o la guerra, afectando el bienestar de las personas y al mismo tiempo, generando costos para la economía global. De cara a 2023, el panorama no es muy alentador y se vuelve más urgente resaltar la prioridad por la salud mental y el aporte que las marcas pueden realizar en este ámbito.
Santiago de Chile, 29 de diciembre de 2022. La salud mental se ha convertido en una preocupación durante los últimos diez años. Según el Global Health Service Monitor 2022 de Ipsos, es el segundo problema de salud mundial y creció 5 puntos respecto del año anterior, solo por debajo del COVID-19, incluso superando el cáncer en determinados países. Esto trasciende a las personas ya que, según investigaciones recientes, cerca del 60% de la población en el mundo piensa «a menudo» sobre su bienestar mental.
Hacia el futuro ya está claro que este problema mantendrá una relevancia absoluta y todavía más en una sociedad donde hay una mayor demanda de los consumidores por exigir que las marcas sean agentes de cambio y contribuyan al bienestar de las personas.
Por esto, muchas marcas están incorporando la preocupación por la salud mental en sus propósitos corporativos. Y la clave está en detectar el enfoque único que resalta su importancia y sobre todo que sea capaz de proporcionar un discurso creíble y valioso para los stakeholders.
En este informe elaborado por la consultora LLYC presentamos algunas claves y cuatro enfoques posibles de abordar sobre la salud mental como un propósito de marca, que permiten a las compañías aportar valor para luchar contra las enfermedades y trastornos de salud mental, conectando con sus audiencias desde un perfil más cercano hacia sus audiencias.
Claves de la salud mental como propósito de marca
Todos los agentes, instituciones y corporaciones que forman parte de la sociedad tienen una responsabilidad y un rol que desempeñar ante las numerosas problemáticas de la salud mental.
- Hacerlo de forma única y diferenciadora: La salud mental tiene tanta relevancia como amplitud. Es importante dar con el ángulo que nos permita mostrar una visión absolutamente singular y acorde a nuestra personalidad de marca, que permita sorprender a nuestra audiencia.
- Nuestro ángulo ha de permitirnos tener una voz legítima y creíble sobre la salud mental: No se trata de apropiarnos de un discurso, sino de construirlo desde nuestra esencia, desde lo que somos, sin pretensiones. No olvidemos que el propósito de una marca es la razón por la que existe.
- Que sea accionable: Que permita activar una forma de hacer, de actuar o un movimiento que tenga una repercusión real y directa en las personas. El propósito no puede ser un discurso vacío, tiene que dar pie o incluso incitar a que nuestra audiencia se movilice y tome las riendas.
Enfoques para abordar la salud mental desde las marcas
DECISION FATIGUE: Se trata del cansancio y agotamiento cuando tenemos que afrontar muchas decisiones. Este «mal del siglo XXI» conduce a dos caminos, o te rindes y abandonas las decisiones por completo, o tomarás decisiones más impulsivas y poco razonables. La conclusión es clara: cuantas más decisiones tomamos, más nos cuesta tomar las próximas. Y ambos escenarios son dañinos para el bienestar mental porque provocan insatisfacción y la sensación de estancamiento.
La pregunta de este enfoque es ¿Qué puedo hacer como marca para aligerar esta carga hacia mis colaboradores? ¿Qué decisiones podría evitar que asuman? ¿Cómo les puedo facilitar el camino? Y muy fundamental ¿Cómo lograr esto de forma tangible y extensible a las demás personas?
SÍNDROME DEL IMPOSTOR: Este síndrome provoca una obsesión con la idea de que, en términos profesionales o académicos, no te mereces el puesto al que has llegado. Y pese a que es más complejo detectarlo, se estima que siete de cada diez personas y afecta principalmente a los colectivos históricamente discriminados en el entorno laboral.
Además de su repercusión directa en el bienestar mental de un determinado individuo, es capaz de afectar a su economía como una limitación para el progreso o al momento de reclamar un aumento salarial. Algunas de las preguntas que orientan este enfoque del propósito son ¿Desde su propósito las marcas pueden influir para mejorar su propio entorno laboral? Y más allá de lo obvio ¿Pueden tomar posición para influir en el entorno laboral en mira hacia una mejor sociedad?
Un ejemplo de este propósito está en la campaña El Pelo No Tiene Género de la línea cosmetológica Pantene, que nos invita a «Volvamos a imaginar el mundo laboral»
ANSIEDAD SOCIAL: Este trastorno es el temor que muchas personas tienen de ser juzgadas por quienes les rodean. Según estimaciones casi 300 millones de personas lo sufren en el mundo y un 25% en menores de 25 años. Quienes padecen esta enfermedad se enfrentan a una exposición continua ya que afecta en el entorno más cotidiano. Entre los efectos que produce, las personas tienden a sentirse continuamente juzgadas o evaluadas por los demás y el rechazo social les provoca un temor paralizante. Incluso este fenómeno aumentó con la presión de las redes sociales.
Un ejemplo es la iniciativa #KeepAClearHeard de la marca Clear cuyo propósito consistió en brindar apoyo y herramientas para la resiliencia y la concienciación del problema que afecta principalmente a los jóvenes. El influencer de esta campaña fue Cristiano Ronaldo quien compartió su historia de superación para alentar a jóvenes para cumplir sus objetivos sin importar la presión del entorno.
SÍNDROME DE BRAIN FOG: Esta afectación mental se caracteriza por la falta de concentración o claridad mental y tiene su origen en nuestro contexto cotidiano, la falta de sueño, el estrés, el exceso de trabajo y las horas que pasamos frente a las pantallas. Este trastorno provoca ansiedad y estrés que comunican al cerebro a un estado de alerta constante con nocivas consecuencias.
Entre las particularidades del trastorno, destaca que tiene un vínculo físico que además de afectar el ánimo y la energía puede provocar obesidad o incluso diabetes. Uno de los mejores antídotos para este problema es el ejercicio y cambiar los hábitos de vida como mejorar la dieta, respirar aire fresco, sentir el sol y practicar algún deporte puede contribuir a disipar la niebla mental.
Una historia interesante está en la propuesta de ASICS con la campaña #CorrerParaParar que apunta a reducir la velocidad frenética que empleamos para la vida cotidiana y así disipar la niebla mental que nos provoca. Y destaca que esta marca lleva este mensaje en su ADN, puesto que ASICS es el acrónimo de Anima Sana In Corpore Sana, el famoso proverbio en latín sobre el bienestar.
Equipo Prensa
Portal Innova
