Reporte Bain & Company
No es una novedad que la inteligencia artificial generativa ya es una herramienta fundamental que está presente en casi todas las industrias. Sin embargo, aún existen dudas sobre los posibles riesgos que esta tecnología conlleva, especialmente en el sector bancario, donde su escala y amplia aplicación podría incrementar los existentes.
La consultora internacional Bain & Company, entrega algunas luces a esta problemática. Para sus expertos, si bien desarrollar la capacidad organizacional para diseñar e implementar responsablemente la IA generativa requiere una inversión de recursos significativos, si las empresas logran centrar su estrategia en cinco principios clave, podrían mitigar los riesgos y lograr sus objetivos mientras cumplen sus ambiciones estratégicas.
En primer lugar, indicaron que es fundamental que los sistemas de IA generativa sean construidos con transparencia y supervisión, para garantizar que existan mecanismos accesibles, justos y funcionales para todas las partes. Además, los consumidores deben estar adecuadamente informados cuando interactúan con una máquina, y contar con la posibilidad de comunicarse con un ser humano para escalar cualquier problema que tengan con una decisión tomada por el sistema.
Por otro lado, la privacidad de los datos y una infraestructura sólida es un punto clave para diferenciarse del resto. Si bien las organizaciones podrán seleccionar el servicio y proveedor que más se ajuste a sus necesidades, lo más importante será que construyan su infraestructura técnica para que sea independiente del modelo de base, y así asegurar la flexibilidad del modelo.
Respecto a las regulaciones, la consultora señala que las organizaciones financieras deben prepararse ante las nuevas reglas, adoptando un enfoque con visión de futuro para la gobernanza y los informes de cumplimiento.
Como cuarto paso, las compañías necesitarán emplear la agilidad, es decir, seguir supervisando las aplicaciones que pueden surgir para evaluar nuevos riesgos y crear un sistema de control humano.
Finalmente, las empresas de servicios bancarios tendrán que evaluar constantemente la madurez de su entidad y la gobernanza de la IA a la hora de seleccionar las aplicaciones para que posteriormente puedan expandirse a un público más amplio.
La IA generativa ya no es futurista sino una realidad inminente, que ofrece a los líderes de servicios financieros oportunidades incomparables y nuevos riesgos comerciales y sociales. Las empresas de servicios financieros pueden adoptar de manera responsable esta tecnología transformadora mediante la creación de marcos de gobierno sólidos y la mejora y actualización de las habilidades de los empleados para adaptarse al lugar de trabajo impulsado por la IA.
Equipo Prensa
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