La latencia baja y alta velocidad son importantes para las actividades catalogadas como críticas, ya que permite una comunicación rápida y eficiente, esencial para la toma de decisiones, el procesamiento de transacciones financieras, y la gestión de sistemas operativos y de seguridad, entre otros.
Santiago, octubre de 2024.- ¿Sabes qué es la latencia? Es el período de tiempo en que un paquete de datos tarda en viajar desde su origen hasta el destino, por lo que una alta latencia suele ser un obstáculo para la fluidez de las comunicaciones, y en actividades que por su naturaleza son consideradas de carácter crítico, es un factor determinante en el éxito o fracaso de las operaciones.
“Otro elemento fundamental es la velocidad, ya que teniendo en cuenta que muchas actividades críticas consisten en telemedicina, logística, control de tráfico aéreo o terrestre, solo por nombrar algunas, dependen en gran medida de una alta transferencia de datos”, explica Víctor Opazo Carvallo, Gerente General de Netline.
El impacto de una baja latencia y una alta velocidad
Por lo anteriormente explica, contar con altas velocidades de transmisión de datos, y también una baja latencia, permite lograr ventajas cruciales en el día a día:
Mejora en la Comunicación y Colaboración: En entornos donde la comunicación en tiempo real es fundamental, como las salas de operaciones, centros de llamadas, y plataformas de trading financiero, una baja latencia asegura que las transmisiones de voz y vídeo sean fluidas y sin interrupciones. Esto reduce los malentendidos y errores que pueden surgir de comunicaciones retrasadas o perdidas.
Eficiencia en el Procesamiento de Transacciones: Para las instituciones financieras, la baja latencia es esencial para ejecutar órdenes de compra y venta en milisegundos, lo que puede significar la diferencia entre ganancias y pérdidas significativas. También permite a las empresas responder rápidamente a las condiciones del mercado y aprovechar las oportunidades al instante.
Operaciones de TI y Respuestas de Seguridad: La latencia baja es vital para las operaciones de redes y sistemas que requieren respuestas inmediatas a las amenazas de seguridad. En sistemas de monitoreo de seguridad, por ejemplo, una respuesta rápida puede impedir accesos no autorizados o mitigar ataques cibernéticos en tiempo real.
Alto flujo de datos: Muchos rubros críticos requieren estar en comunicado 24/7 con su centro de datos, lo que también implica un alto intercambio de archivos, muchas veces de gran tamaño. Contar con un enlace dedicado y simétrico, con velocidades que pueden alcanzar los 20Gbps, facilita el éxito de las operaciones.
“Netline, a través de su oferta de Internet Dedicado Inalámbrico, proporciona soluciones que son intrínsecamente adecuadas para manejar los desafíos de latencia y velocidad”, comenta Víctor Opazo Carvallo.
Equipo Prensa
Portal Innova
