- El reporte elaborado por el grupo inmobiliario Empresas Socovesa, muestra que un 81% de cotizantes de departamentos está dispuesto a pagar más por viviendas que incorporen soluciones de ahorro en agua y energía.
- Éste es el primer y único estudio inmobiliario en Chile que profundiza en la relación de los cotizantes chilenos con la sostenibilidad en el plano doméstico y de la vivienda.
SANTIAGO, Noviembre 2024.– La sostenibilidad es un concepto cada vez más presente en el plano doméstico, sin embargo, en la práctica, la adopción de acciones más amigables con el medio ambiente en el hogar parece ser algo muy incipiente.
Por eso, y para una mejor comprensión de cuánto valoran realmente los chilenos las acciones sostenibles y qué tan dispuestos están a ser más cuidadosos con el medioambiente, Empresas Socovesa realizó el estudio “¿Cuánto valoran los chilenos vivir en un hogar sostenible? Expectativas, conductas y valoración de la industria inmobiliaria”.
El principal objetivo de esta inédita investigación fue identificar por primera vez en el sector inmobiliario, cómo los cotizantes de vivienda perciben la sostenibilidad en el hogar, cómo influyen estos factores en sus decisiones de compra y qué valor le asignan al ahorro económico para promover soluciones sostenibles.
En total, fueron más de 700 cotizantes de propiedades en la Región Metropolitana y otras regiones, quienes a través de sus respuestas confirmaron que solo 3 de cada 10 personas se consideran sustentables en el hogar, al mismo tiempo que señalaron que la principal razón para adoptar prácticas sostenibles en el hogar es el ahorro económico, donde el 81% de los encuestados se mostró dispuesto a pagar más por viviendas con características que reduzcan el consumo de agua y energía, evidenciando una preferencia por aquellas soluciones que ofrezcan beneficios financieros directos.
Otro dato relevante que arroja el estudio, es que el 60% de los cotizantes no está al tanto de las iniciativas sostenibles implementadas por las inmobiliarias, lo que puede revelar una desconexión entre las expectativas de los consumidores y la comunicación de las empresas del sector.
Esta cifra, toma aún más valor si se considera que el 50% de los encuestados prioriza marcas comprometidas con el medioambiente al momento de decidir una compra y 8 de cada 10 personas considera importante o muy importante que las compañías del sector integren soluciones amigables con el medioambiente en sus proyectos, que cuenten con procesos constructivos sostenibles y que usen materiales que contribuyan a reducir la huella de carbono.
Lo anterior refuerza la idea de que los consumidores buscan que la sostenibilidad sea facilitada por terceros (en este caso las empresas), las que, a su vez, deben asumir un rol activo para motivar el cambio. «Las inmobiliarias no solo tenemos la responsabilidad de cumplir con las expectativas de los chilenos en materia de ahorro energético, sino también de proveer herramientas y soluciones que permitan a las viviendas convertirse en verdaderos facilitadores en la vida de las personas”, señala Francisca Leon, Gerente de Research de Empresas Socovesa.
Por otro lado, respecto a los desafíos de la industria frente a este contexto, Matías Abogabir, Gerente de Sostenibilidad de Empresas Socovesa, menciona que “si bien el consumidor valora mucho las soluciones sostenibles que otorgan un impacto inmediato en su bolsillo, el verdadero desafío en la industria está en repensar el diseño inmobiliario desde su origen, integrando criterios de sostenibilidad en toda la cadena de valor”.
Acciones sostenibles: ¿qué hacen las personas y por qué?
Tal como se mencionó anteriormente, la mayoría de las personas ha adoptado medidas enfocadas en el ahorro de recursos. Entre las acciones más comunes, destacan la reducción del consumo de electricidad, mencionada por un 78% de los encuestados, seguida por la disminución en el uso de agua, con un 68%, y la separación de residuos, reciclaje o compostaje, que alcanza un 52%.
Al ser consultados por las motivaciones detrás de estas acciones, un 81% mencionó el cuidado del medio ambiente como su principal razón, mientras que un 78% lo hace buscando reducir gastos en recursos o cuentas a fin de mes. También cabe señalar que un 35% de las personas indicó que no cuenta con los recursos económicos suficientes para adoptar plenamente un estilo de vida sostenible.
Finalmente, como parte de las acciones que realizan las personas todavía no se observa una disposición relevante a hacerse parte del mundo de la movilidad eléctrica. En ese sentido, un 57% de los encuestados indicó que no tiene planes de adquirir un vehículo eléctrico, mientras que un 33% lo considera a mediano plazo y sólo un 6% está pensando en hacerlo a corto plazo. Este interés, aumenta en función de cotizantes que buscan viviendas de mayor valor, entre 5.000 y 8.000 UF, donde la proyección de contar con un auto eléctrico en el corto plazo sube a un 12%.
Equipo Prensa
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