- El 46% de los chilenos ha enfrentado intentos de fraude en sus medios de pago, y el 66% ha recibido mensajes fraudulentos que buscan obtener información personal.
El verano llega cargado de descuentos, promociones y concursos online. Pero detrás de las tentadoras ofertas, muchas veces se esconde un riesgo latente: la exposición de datos personales. Expertos advierten que la entrega de información a cambio de beneficios puede abrir la puerta a fraudes y usos indebidos, en un contexto donde la preocupación por la seguridad digital va en aumento.
Según el estudio Medios de Pago Latam 2024 , el 46% de los chilenos ha sido víctima de intentos de fraude en sus medios de pago, con las tarjetas de débito liderando como el método más vulnerado (21%). Les siguen el uso de efectivo (11%) y las transferencias electrónicas (9%) como objetivos recurrentes de estos delitos. Además, el 15% de los encuestados reporta haber sufrido un fraude concreto en el último año. Aunque esta cifra está por debajo del promedio regional (17%), posiciona a Chile como uno de los países con mayor exposición al fraude en América Latina.
Es fundamental que los consumidores comprendan que, al entregar sus datos personales a cambio de una promoción, están otorgando un activo valioso que debe ser protegido. “La recomendación es que las empresas aseguren la transparencia en el tratamiento de la información y que los usuarios se tomen el tiempo de leer las políticas de privacidad antes de aceptar cualquier oferta. Lo anterior es sin perjuicio que, la nueva normativa en Chile nos brindará muchas más herramientas para exigir a las empresas un manejo responsable de los datos personales que están tratando” comenta Katherynne Moreno Abogada especialista en materias de Data Compliance de WB Consulting.
Las promociones de verano suelen pedir datos como correos electrónicos, teléfonos o incluso información bancaria para acceder a descuentos. Sin embargo, no siempre queda claro cómo las empresas gestionan esta información, lo que aumenta el riesgo que estos datos terminen en manos equivocadas. Un 66% de los chilenos afirma haber recibido correos, mensajes de texto o WhatsApp fraudulentos que simulan ser de instituciones financieras, mientras que el 59% menciona llamadas telefónicas con el mismo objetivo.
El aumento de fraudes digitales está directamente relacionado con la cantidad de datos personales que circulan sin control. “Es preocupante que casi el 60% de los chilenos haya sido blanco de intentos de fraude mediante llamadas o mensajes que simulan ser de entidades legítimas. En WB Consulting, promovemos una cultura de protección de datos, educando a empresas y usuarios sobre cómo gestionar la información de manera segura y conforme a la ley”, menciona la abogada Katherynne Moreno
El problema afecta de forma más significativa a los menores de 36 años, quienes representan el 19% de las víctimas de fraude reportadas, y los sectores socioeconómicos medios y bajos (16%). En este escenario, la falta de transparencia en el manejo de datos personales y la escasa educación digital aumentan la vulnerabilidad de los consumidores.
Expertos en seguridad recomiendan verificar la legitimidad de las promociones, evitar compartir datos sensibles en sitios web desconocidos y conocer los derechos que establece la Ley 19.628 sobre protección de datos personales y la vida privada, que permite exigir la eliminación de información personal de bases de datos no autorizadas.
La especialista en protección de datos, también comenta que “en un contexto donde los sectores más vulnerables de la población y los más jóvenes son los principales afectados por fraudes, resulta indispensable fomentar la educación digital y crear una conciencia colectiva acerca de la protección de nuestros datos personales. La Ley 19.628 otorga a los ciudadanos el derecho de solicitar a la empresa, la eliminación de sus datos de bases de datos no autorizadas. Si la empresa no toma ninguna medida frente a esta solicitud, podemos recurrir a tribunales para hacer valer nuestros derechos.
Es hora de que tanto consumidores como empresas asuman un rol proactivo en la protección de la información personal. El desafío está en disfrutar las promociones del verano sin comprometer la seguridad personal. Proteger los datos es esencial para evitar ser víctima de fraudes y garantizar que las ofertas no se conviertan en un dolor de cabeza a largo plazo.
Equipo Prensa
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