“Nuestros mayores desafíos estarán puestos en cómo nos preparamos para dar solución a los grandes problemas que afectan a nuestro planeta”, dijo Fabiola Vásquez, experta de la Universidad de La Frontera, tras la cita.
Cambio climático, futuras pandemias, energías renovables, inteligencia artificial e innovaciones sociales fueron algunos de los temas abordados en el AUTM Annual Meeting 2023, evento realizado recientemente en Austin, Estados Unidos, y que reunió a profesionales del I+D para enseñar lo último de las empresas locales e internacionales ligadas a la innovación y transferencia tecnológica.
El AUTM es una organización no gubernamental líder y compuesta por una comunidad aproximada de 3 mil miembros, quienes se desempeñan en más de 800 universidades, centros de investigación, hospitales, empresas y organizaciones gubernamentales. La cita es el mayor encuentro de este tipo en Estados Unidos y uno de los más relevantes a nivel mundial.
Desde Chile, asistió una delegación compuesta por representantes de universidades y coordinada por HUBTec Chile, iniciativa que fomenta el escalamiento de tecnologías y la creación de emprendimientos científico tecnológicos. En la Universidad de La Frontera valoraron la invitación. “Nuestros mayores desafíos estarán puestos en cómo nos preparamos para dar solución a los grandes problemas que afectan a nuestro planeta. Es lo que nos han transmitido especialistas líderes del ámbito de la transferencia tecnológica, que han estado presentes en este encuentro internacional. Ahora la tarea es guiar a nuestros equipos en el proceso enmendado”, destacó Fabiola Vásquez, coordinadora de la Unidad de Transferencia Tecnológica de esa casa académica.
Para la experta, la sociedad demanda respuestas efectivas a los principales problemas que afectan a la sociedad, por lo que a su juicio la investigación y el desarrollo deben apuntar a un sentido de propósito, más que a cuestiones exclusivamente económicas. “Para ello es fundamental generar una sólida integración entre múltiples grupos de interés y trabajar de forma colaborativa. Especialmente en la disponibilidad de recursos que faciliten el acceso a resultados de mayor potencial en las investigaciones nacionales”, dijo.
“Necesitamos generar nuestro propio modelo para construir esta relación, integrando a la empresa y los ciudadanos desde el proceso creativo de las iniciativas de I+D hasta la validación y posterior aplicación de las innovaciones, fomentando la cultura de innovación y transferencia. Hemos tenido un importante crecimiento en los últimos años, fortaleciendo una masa crítica de nivel internacional, aunque en América Latina la importancia de esta área debe seguir creciendo”, precisó Vásquez.