La transformación digital ha sido el centro de muchas reuniones y agendas en los últimos años, incentivando formas modernas de trabajar, nuevos modelos empresariales y de mayor valor para los clientes. Una revolución que producto de la pandemia de COVID-19 vivió un auge importante en términos de ritmo y velocidad de transformación en muchas organizaciones.

 

Sin embargo, cuando hablamos de transformación en la mayoría de los casos está ligada a un solo evento o a una serie de eventos relacionado a un mismo objetivo. En términos digitales, por ejemplo, esto toma la forma de un proyecto individual, como un nuevo proyecto de ERP, o una serie de iniciativas que forman un programa más amplio focalizado en la experiencia del cliente.

 

Y es que la transformación digital es, sin duda, un medio para modernizar y acelerar la toma de decisiones, utilizando innovación y creatividad para optimizar tanto la experiencia como el performance financiero. Sin embargo, si esta termina luego de la integración de tecnología, inevitablemente los beneficios irán disminuyendo con el tiempo.

 

Winston Churchill dijo “mejorar es cambiar, ser perfecto es cambiar a menudo”. La perfección es un pedido ambicioso en la economía actual, pero sus dichos son más reales que nunca para las empresas en 2022. Para lograr un entorno auténticamente digital con la resiliencia, escalabilidad y flexibilidad necesaria para adaptarse al cambio, mitigar los riesgos y a su vez, navegar por la incertidumbre del mercado, una transformación única no será suficiente. Estamos operando en una economía que está evolucionado a un ritmo nunca visto, por lo que las empresas deben estar continuamente explorando nuevos modelos empresariales y canales para adaptarse a los cambios; desarrollar la innovación; y estar preparados para diversificar los recursos en áreas o retos nuevos en forma instantánea.

 

Para crear el tipo de cultura digital que requiere la economía moderna, la transformación debe ser continúa. Es una estrategia basada en lograr el entorno adecuado, y no en focalizarse solo en seleccionar la tecnología correcta. El cambio de digitalización a una transformación perpetua requiere contar con los recursos adecuados de talentos, conocimiento, inversión y visión, no solo a corto plazo, sino que a largo plazo.

 

Existe una buena razón por la que Amazon es frecuentemente considerado un buen ejemplo de empresa que represente esta estrategia. Según la compañía, la innovación no es algo que ocurre en un solo momento y lugar, sino más bien es algo que sucede como parte de todos los días de trabajo. En la práctica, cada reunión y decisión tomada, garantiza que el objetivo de la empresa está dedicado a mejorar la experiencia del cliente.

 

En los próximos años, los verdaderos ganadores digitales, serán aquellos que adopten la transformación continua para mantenerse relevantes en el mercado, y desarrollar una ventaja competitiva en forma más rápida y tangible que la competencia.

Ruben Belluomo

Gerente comercial de Infor Cono Sur

Google News Portal Innova
Síguenos en Google Noticias

Equipo Prensa
Portal Innova

VIAS IMPORTACIONES 2024