- Una carbonatación adecuada es la clave para crear la efervescencia perfecta.
- El proceso de gasificación consiste en incorporar dióxido de carbono o CO2 al agua o a la bebida.
Tomar una bebida helada y burbujeante es un verdadero placer para muchos, sobre todo considerando el alto impacto de esta industria en nuestro país. Según la revista británica The Lancet, Chile es el país con mayor consumo de bebidas del mundo. Así también lo demostró un estudio realizado por la Universidad del Bío Bío y el Ministerio de Salud que reveló que las familias chilenas destinan el 9% de su presupuesto de alimentos a bebidas.
Así, si bien el sabor es fundamental, son las burbujas las que hacen de las bebidas un producto tan deseado. Lo que los fanáticos de esta sensación no saben, es que el efecto placentero se debe a la aplicación de dióxido de carbono o CO2 al agua o bebida, un gas incoloro e inodoro, con sabor ligeramente picante, existente en la atmósfera en baja concentración. Cuando la bebida se despresuriza, esta deja escapar el CO2 bajo la forma de finas burbujas, generando esa sensación refrescante y fuerte en la garganta, muy característico de estos bebestibles.
También existen algunas condiciones naturales que pueden producir agua naturalmente carbonatada, principalmente asociado a pozos de agua cercanos a zonas con actividad volcánica, lo que incluso las ha posicionado como un producto con propiedades curativas.
Los requerimientos y crecimiento de la industria de este tipo de bebidas han llevado a empresas como INDURA a desarrollar soluciones de carbonatación que permitan crear una burbuja o efervescencia perfecta en las gaseosas.
Entonces, ¿qué debe tener una bebida para lograr una efervescencia perfecta? Roberto Contreras, subgerente de negocios del área de Alimentos de INDURA, explica que el CO2 se disuelve fácilmente en el agua. “El proceso de adicionar CO2 al agua o a la bebida se realiza a una baja temperatura y a una presión media, y se le llama proceso de Carbonatación; cada tipo de bebida requiere de una determinada cantidad de CO2 para lograr el sabor que la caracteriza, significa que, la mayoría de las veces, la cantidad de CO2 de una bebida es diferente a la de otra parecida”, señala el experto.
En este contexto, las soluciones que ofrece INDURA para la industria de las bebidas se destacan por suministrar gases grado alimento y contar con el equipamiento necesario que permita controlar las variables que inciden en el proceso de Carbonatación, en donde los conceptos de temperatura, presión y flujo son de gran relevancia.
Equipo Prensa
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