El empresario chileno-ecuatoriano fundó un negocio frutícola líder en el país que lo acogió hace más de 30 años. Hoy, Massuh Isaías reflexiona sobre sus aciertos y el futuro de los nuevos negocios.

Los primeros días de Gabriel Massuh Isaías en Chile no fueron fáciles. Originario de Guayaquil, Massuh creció entre el trabajo en las tierras agrícolas de su familia, para comprender que su pasión estaba en los negocios. Tras un paso por Estados Unidos, el joven emprendedor decidió dar un giro a su vida.

A los 23 años, después de estudiar Agronomía en la Universidad de Cornell y Negocios en Florida, optó por emprender y establecerse en Chile, con una visión innovadora sobre el mercado de importación frutícola, aprovechando la ventaja de su país natal, Ecuador, en la industria del plátano y recordando sus orígenes familiares.

En Chile, frente a la dura competencia de un sector altamente saturado, con un producto de gran demanda y la desventaja de operar en un país incapaz de cultivar, Gabriel Massuh Isaías encontró una oportunidad ideal para emprender y fundar Bagno en 1993. 

Las claves de su éxito se basan en una lectura visionaria y audaz del mercado, identificando tendencias y visualizando el futuro de su negocio.

Tendencias: el futuro de los negocios según Massuh

A medida que la tecnología avanza y cambian las maneras en que las personas se relacionan con su trabajo, sus rutinas y actividades diarias, las empresas deben ajustarse para posicionar liderazgos y mantenerse como una opción relevante para sus consumidores.

El futuro de los negocios pareciera inclinarse fuertemente hacia la personalización y la diversificación, enfrentando y derrotando competidores. Hoy en día diversificar es más que agregar variedad. Representa una comprensión integral de las tendencias de consumo dinámicas y las preferencias cambiantes de las personas.

En ese sentido, parte de una estrategia visionaria es pensar en la diversificación. Según Massuh, “la diversificación de productos, la personalización de las ofertas y la creación de una experiencia de compra atractiva y moderna son elementos fundamentales para destacar en cualquier negocio”.

Sin embargo, el futuro también requiere de estabilidad y compromiso con la inclusión y la sostenibilidad, por mencionar algunos conceptos. Esta comprensión permite a las empresas satisfacer sus necesidades de mercado y también desarrollar políticas claras y transversales, fortaleciendo su posición competitiva.

En ese ámbito, las empresas ya buscan métodos para disminuir su consumo de electricidad, gestionar de manera eficiente el uso del agua, reemplazar productos químicos, y adoptar tecnología y maquinaria especializada en diversas actividades operativas. 

Para Massuh, “estos ajustes se orientan a una mejor utilización de los recursos, algo esencial para las grandes empresas que desean controlar sus costos y márgenes de negocio frente a las fluctuaciones económicas del futuro”. Esto, además, agrega valor al proceso de producción de un bien o servicio.

Este año, la irrupción de la Inteligencia Artificial (IA) ha tomado un protagonismo trascendental. El 2024 será el momento en que la IA transformará todos los sectores y empresas de manera total, por lo que el ritmo de desarrollo e innovación en Inteligencia Artificial seguirá acelerándose. 

Para hacer frente a ello, Massuh explica, “Las empresas ya adoptan tecnologías de IA cada vez más sofisticadas, incursionando en áreas como el procesamiento del lenguaje natural o la automatización de procesos complejos para contar con información más precisa y detallada para tomar decisiones estratégicas”.

De esta manera, los algoritmos de aprendizaje automático avanzados analizarán grandes volúmenes de datos, descubrirán patrones, anticiparán tendencias del mercado y proporcionarán insights cruciales para la toma de decisiones con mayor precisión, extrapolando su influencia hacia otras industrias y negocios.

Finalmente, quien desee pensar e imaginar el futuro de los negocios debe comprender cómo cambian las sociedades, visiones y consumidores. Cada persona es única y su comportamiento diferente y vital para un negocio.

Hoy en día uno de los mayores retos que enfrenta el mundo es el consumismo. En ese sentido, las empresas y la sociedad busca corregir el desequilibrio causado por el consumismo excesivo y al mismo tiempo dejar un impacto positivo para el futuro de los emprendimientos.

A esta hora, los modelos de negocio centrados exclusivamente en el consumo están quedando obsoletos. Por ello el valor de la diversificación y la personalización, según Massuh Isaías. Las empresas hoy deben transicionar de una estrategia enfocada en la producción hacia una economía basada en la responsabilidad compartida y la sostenibilidad.

El legado de Gabriel Massuh Isaías

Bagno, la empresa que Massuh fundó en 1993 se ha consolidado como líder en la industria de frutas, exportando plátanos desde Ecuador a diversos países y distribuyendo una variedad de frutas en todo Chile.

Sin embargo, en sus inicios, Massuh enfrentó numerosos desafíos debido a su juventud y a la dificultad de establecer un negocio en un mercado extranjero, con mucha competencia y complejidades logísticas.

«Me topé con muchas dudas y dificultades. Ser joven y emprendedor en un nuevo país no era fácil. Tenía que demostrar mis habilidades y mi valor en un mercado dominado por competidores más experimentados», reflexiona Massuh sobre sus inicios.

Con el paso del tiempo su empresa ha crecido y se ha consolidado como una marca innovadora y sostenible, generando confianza y autoridad en la importación de frutas gracias a una visión amplia y un análisis certero del futuro y el camino de los negocios.

 

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