Por Macarena Gaete, Ejecutiva de Experiencia al Cliente de ITQ latam
Uno de los primeros aportes más relevantes en la fuerza laboral de las mujeres es la estructura y el orden. Estas son características que fortalecen la gestión y administración de los servicios, los que a su vez son muy importantes para la rentabilidad de las empresas.
En general, las mujeres logran empatizar con las necesidades y las urgencias de los clientes, intentando generar respuestas lo más agiles posibles, produciendo la sensación de acompañamiento y apoyo en la resolución de problemas y dificultades, entregando como resultado la fidelización de los clientes.
En las áreas de Servicio, las mujeres hemos demostrado un mejor manejo de lo que son las habilidades blandas, mostrando la empatía ante las necesidades que cada cliente presenta en el día a día, por lo tanto, tenemos la capacidad de entregar la confianza que una persona necesita para poder compartir y conversar sobre sus problemas y/o inquietudes.
Podemos evidenciar nuestro buen manejo de habilidades blandas y empatía, cuando un cliente se propone a renovar un servicio o a contratar nuevos proyectos, debido a la buena experiencia que se realiza durante nuestra gestión.
Sin embargo, el desafío está presente. La brecha salarial, por ejemplo, continúa siendo desproporcionada; los estereotipos de género y, principalmente, el desequilibrio en el manejo del tiempo laboral y familiar, ya que como mujeres seguimos teniendo el mayor porcentaje de responsabilidad en todo lo que conlleva la vida familiar.
Ciertamente, en el mundo laboral aún nos queda mucho por qué luchar, buscar la igualdad y el respeto que todas nos merecemos; porque hemos demostrado que tenemos la capacidad de lograr los mismos objetivos que los hombres, teniendo en la mayoría de los casos el doble de responsabilidad. Muchas de nosotras hemos tenido que lidiar ante burlas, violencia, discriminación y aun así hemos salido adelante.
He conocido a mujeres madres, estudiantes y trabajadoras, desarrollándose laboralmente en grandes cargos, pero ganando la mitad de un sueldo de un hombre, con mismas profesiones y horas laborales.
No se rindan, ya hemos logrado cambios en nuestra sociedad, hemos demostrado al mundo que sí podemos, que somos fuertes y capaces de desarrollar cualquier actividad que nos impongan, que la igualdad de género y la equidad social sean siempre una constante en nuestras vidas. Somos valientes e inteligentes que nada ni nadie nos ponga en duda, pero aún nos falta y entre todas lograremos ser vistas como nos lo merecemos.
¡Feliz día a todas las mujeres fuertes y valientes!
Equipo Prensa
Portal Innova
