Kimal-Lo Aguirre: la retrasada línea de transmisión que podría evitar los efectos de un corte masivo de luz
La iniciativa atravesará cinco regiones del país e instalar un total de 2.691 torres, con una línea de transmisión de una longitud de 1.342 km.
El megacorte de energía eléctrica que afectó al país ayer desde Arica y Parinacota a Los Lagos volvió a encender el debate en torno a la debilidad de la infraestructura energética.
En medio de eso, algunos volvieron la mirada al proyecto Kimal-Lo Aguirre, una megalínea con una inversión de US$ 1.480 millones que debió haber empezado su construcción en 2022, según los primeros cálculos, pero que hoy, por diversas razones, se encuentra en medio de la evaluación ambiental.
La iniciativa, en manos del consorcio Conexión Energía, pretende atravesar cinco regiones del país e instalar un total de 2.691 torres, con una línea de transmisión de una longitud de 1.342 km. En específico, iniciaría en la comuna de María Elena, en la Región de Antofagasta, hasta Lo Aguirre, en la comuna de Pudahuel, en la Región Metropolitana.
Se trata de un proyecto mandatado por el Coordinador Eléctrico Nacional (CEN), que tiene como objetivo garantizar un suministro eléctrico más estable y contribuir a las metas de carbono neutralidad comprometidas por Chile.
La «permisología»
La iniciativa ha debido enfrentar una serie de trabas para su puesta en marcha. En 2022 inició su tramitación ambiental en el Servicio de Evaluación e Impacto Ambiental (SEIA).
A comienzos de 2024, el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) publicó el Informe Consolidado de Solicitud de Aclaraciones, Rectificaciones o Ampliaciones (ICSARA). El documentó alcanzó las 753 páginas y entregó un total de 1.698 observaciones, realizadas por el conjunto de los órganos del Estado con competencia en la materia.
Según consignó La Tercera en enero de 2024, la firma consideró el número de observaciones como «razonable», aunque solicitó «más nivel de detalle» en 182 de las observaciones.
Cinco meses después, en todo caso, se agregaron más observaciones: las de la ciudadanía, que llegaron a los 900 comentarios.
Finalmente, en diciembre, la firma comunicó que en total serían 4.941 los permisos sectoriales que debería tramitar, ante distintos organismo estatales, dependientes de los Ministerio de Obras Públicas, de Salud, de Vivienda y Urbanismo, y de Agricultura, entre otros.
Del total de los permisos 4.572 están ligados a las líneas de transmisión, mientras que 369 son permisos industriales, según informó la firma en la Comisión de Economía del Senado, en diciembre.
«El número de permisos asociados a una RCA se ha triplicado en los últimos 20 años, y esto explica que hoy día cerca de un 10% del valor de inversión de un proyecto sea nada más que en permisología», dijo Carola Venegas, gerenta de Sostenibilidad de Conexión Kimal-Lo Aguirre en la misma sesión.
Ayer, precisamente tras el corte de energía, el SEA publicó el segundo ICSARA del proyecto. En el documento existen casi 1.400 comentarios que deberán ser atendidos por la compañía.
Se espera que la línea de transmisión de corriente continua -que será la primera de este tipo en el país- entre a operar en 2029.