Compartir con los colaboradores, no sólo es útil para estrechar lazos y mantener el buen clima laboral. Celebrar con ellos y los clientes ayuda a demostrar cuán valiosas son las personas para la empresa.
No todos lo saben, pero, el artículo número 31 de la Ley sobre Impuesto a la Renta acepta la compra de alcohol como gasto asociado a la empresa siempre que cumpla con ciertos requisitos.
Cuando las «vacas están flacas», este beneficio tributario es de gran ayuda para los emprendedores que celebran las fiestas patrias junto a su equipo de trabajo, para motivarlos y reforzar su compromiso con el negocio.
En este ámbito, el director de Adactiva, Cristian Montero, explica que son cuatro las condiciones que impone el Servicio de Impuestos Internos para que las compras de vino, chicha y otros licores se consideren gastos de la empresa:
- Estos gastos deben ir asociados a la generación de renta, es decir, deben tener alguna relación con el giro o la actividad económica de la empresa.
- Los dineros no deben haber sido rebajados en virtud del artículo 30 de la misma ley, que se refiere a los gastos rechazados.
- Los gastos deben estar pagados o ser adeudados en el ejercicio comercial correspondiente.
- El desembolso debe acreditarse o justificarse en forma fehaciente ante el Servicio de Impuestos Internos (SII).
“Estos gastos se pueden deducir de la base imponible del impuesto a la renta, lo que significa que se pagan menos impuestos por las utilidades”, explica Cristian Montero, director de Adactiva. Sin embargo, no hay que olvidar que la compra de alcoholes tiene que tener relación con actividades extraprogramáticas de la empresa.
“Igualmente, los gastos pueden justificarse si son realizados para la captación y fidelización de clientes, ya que podrán ser calificados como necesarios para producir la renta”, detalla el contador auditor.
Los requisitos para que el SII acepte estos gasto son los siguientes:
- Que el origen sea voluntario y no provenga de una obligación contractual.
- Que estén dirigidos y abiertos a todas las personas de la empresa.
- Que estén dentro de un rango de montos razonables.
“Invitar a tus clientes a un almuerzo, una cena o un evento con alcohol puede ser útil para fortalecer la relación con ellos y agradecerles su lealtad. Además, compartir con ellos un momento distendido puede ser una oportunidad para conocer mejor sus necesidades, expectativas y preferencias, ofreciéndoles más adelante soluciones mucho más personalizadas”, sostiene Cristian Montero.
Adicionalmente, el director de Adactiva explica que comprar alcohol con dinero de la empresa le permite a las pymes ahorrar impuestos. Aunque, claro, siempre es bueno asesorarse y, ante cualquier duda, consultar a los especialistas, para mantener una relación sana y fluida con el SII.
Equipo Prensa
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