Cambio en la mentilidad de los profesionales; adaptarse de manera rápida a los riesgos, ser más eficiente al entregar un producto y servicio; y proteger el valor generado por los nuevos activos digitales, son algunas de ellas.
La turbulencia de los mercados, desde el punto de vista del aumento de los incidentes de ciberseguridad, como los últimos conocidos en servicios públicos de nuestro país, el avance de la economía digital y el viaje digital que las organizaciones están desarrollando e implementando, son factores que han modificado el propósito que tiene la ciberseguridad dentro de las organizaciones. Si en sus inicios, existían dudas o poco entendimiento sobre este, e incluso era visto como una barrera para el flujo de información o el normal desarrollo de actividades, esto ha ido cambiando.
En el actual escenario, la ciberseguridad tiene como propósito “habilitar el viaje de la transformación digital de las empresas, aspecto que debe ser concebido como la razón principal de la existencia de la ciberseguridad, que permite generar y proteger el valor del negocio, por medio de la gestión de riesgos y la resiliencia; al tiempo que busca dar cumplimiento a los objetivos del negocio de la empresa, para obtener una rentabilidad superior al promedio del mercado”, señala José Antonio Lagos, profesor de la unidad de Educación Ejecutiva (UEjecutivos) de la FEN U. de Chile.
Pero no se puede hablar de propósito, sin vincularlo a la cultura de la organización, la cual define el comportamiento de sus empleados. En este caso, la cultura de ciberseguridad busca reducir los riesgos generales de ciberseguridad, fortaleciendo las áreas más débiles de la organización y sus trabajadores. Esta “contribuye a entender mejor el propósito de la ciberseguridad, y generar una mejor adaptación entre la estrategia de negocio, la transformación digital y la ciberseguridad”, aclara Lagos.
Cambio de mindset
La cultura de ciberseguridad no solo implica definir los comportamientos y hábitos adecuados que deben existir en la empresa, sino que también debe apuntar a un cambio de mentalidad o mindset, aspecto que debiera estar orientados a buscar su crecimiento por sobre una mentalidad fija, explica Lagos.
Una mentalidad en crecimiento busca desarrollar nuevas habilidades, talentos y dones a lo largo del tiempo, como resultado de la fuerza de voluntad, el compromiso y la dedicación. Lagos sostiene que “las personas con un mindset progresivo saben que las dificultades pueden convertirse en oportunidades, así como la inteligencia es algo que se puede desarrollar con dedicación y esfuerzo”.
Este cambio de mentalidad resulta ser clave, ya que permite eliminar las barreras que los propios colaboradores se imponen al pensar que la ciberseguridad es una cuestión técnica, cuando el problema real es que en la economía digital la ciberseguridad es parte del ADN de la interacción del ser humano con Internet.
Junto con ello, para implementar una cultura de ciberseguridad exitosa es preciso adaptarse rápido a los riesgos, en base a las nuevas amenazas y vulnerabilidades; ser eficiente al entregar un producto y servicio, pensando en la agilidad, time to market y ciberseguridad; y, por último, proteger el valor generado por los nuevos activos digitales, puntualiza Lagos.
Equipo Prensa
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