Por Rodrigo Correa, psicólogo laboral y fundador de Valora People
Las redes sociales, en cuanto a la selección de talento, entregan información complementaria que pueden tener del candidato y que no necesariamente se obtienen en una entrevista tradicional. A través de sus perfiles se puede conocer mucho más la personalidad, valores e intereses de los postulantes, lo que también facilita la interacción con los mismos.
Existen distintos perfiles en Internet, sin embargo, no todos van a reflejar si el postulante es idóneo para un cargo, ya que muchos de ellos se enfocan en actividades familiares, con amigos, afinidad política, religiosa, entre otras, lo que no necesariamente indicarán si la persona es responsable, trabaja bien en equipo, entre otros aspectos ideales para una determinada organización. Es por esto que se debe tener cuidado con estigmatizar basándose en una determinada plataforma social.
Junto con esto, es importante considerar los riesgos éticos al revisar los perfiles en RRSS considerando, además, que también se puede invadir la privacidad de los candidatos vulnerando su espacio más personal. Esto es algo similar a lo que ocurría antes con DICOM, donde a muchos se les rechazaba por estar sobreendeudados, siendo que a veces esto ocurría porque, sencillamente, la persona no había tenido trabajo.
Toda información que se pueda obtener en Internet tiene que ser considerada sólo un complemento del currículum y de la entrevista personal, no un indicador de cómo es el postulante, ya que también hay que tener en cuenta que no todas las personas suben a sus redes las actividades que realizan o las que mejor los representan. Es por esto que, al momento de conocer al candidato se hace fundamental utilizar herramientas estandarizadas, modernas, dejando atrás extensas encuestas que muchas veces no van a reflejar la personalidad y competencias necesarias para desenvolverse en una organización.
Si bien las redes sociales son importantes y pueden ser consideradas como material complementario, éstas no deben ser decisivas a la hora de tomar una decisión. Tener una política clara y no caer en sesgos va a ser mucho más efectivo a la hora de escoger un candidato, evitando generalizar por lo que se ha visto en una foto o se ha leído en alguna plataforma. Acá, una imagen vale más que mil palabras, puede no estar totalmente en lo correcto.