En el último siglo, la población mundial se ha cuadruplicado, lo que ha llevado a un aumento del 600% en la demanda de agua a nivel global. Este incremento se atribuye en gran medida a la huella hídrica de la industria. Paralelamente, unos 800 millones de personas aún carecen de acceso a agua potable segura. Reconocemos que la industria es fundamental para la economía de nuestros países y que, simultáneamente, no podemos dejar de garantizar el acceso al agua, esencial para nuestra población. Por ello, esta iniciativa ha capturado la atención de grandes corporaciones, buscando generar un impacto positivo en la gestión de los recursos hídricos.
Ser ‘Water Positive’ implica el compromiso de una organización por devolver al medio ambiente más agua de la que consume en sus operaciones. Esta práctica, que busca superar el volumen de agua utilizada con la cantidad reintegrada al entorno natural, permite a las entidades no solo minimizar su impacto hídrico, sino también contribuir de manera significativa a enfrentar los desafíos globales relacionados con el agua. Esto incluye abordar la escasez hídrica y la necesidad de mejorar el acceso a agua potable y a servicios de saneamiento en comunidades alrededor del mundo.
El agua, esencial para la vida, es fundamental para nuestra supervivencia. A pesar de que el 70% de la superficie terrestre está cubierta por agua, solo una pequeña fracción de esta, equivalente a una esfera de 56 km de diámetro, es agua dulce accesible, lo que subraya la precariedad de este recurso vital. Paralelamente, las emisiones de CO2 representan un desafío crítico que amenaza nuestro futuro como civilización, exacerbando los problemas relacionados con el agua al alterar los ciclos hidrológicos y aumentar la frecuencia de eventos extremos.
Es crucial recordar que cerca de un millón de personas fallecen anualmente por enfermedades diarreicas, debido a la insalubridad del agua, un saneamiento deficiente o la falta de higiene. La escasez de agua potable y el acceso limitado a servicios de saneamiento exponen a millones de personas a riesgos graves, lo que nos obliga a tratar la crisis del agua con la misma seriedad y urgencia con que enfrentamos el cambio climático. Este paralelismo destaca la necesidad imperativa de acciones coordinadas para asegurar la disponibilidad de agua limpia y segura para todos, mientras se combate la crisis climática para proteger nuestro futuro colectivo.
Alejandro Sturniolo, Vicepresidente de Marketing y Sustentabilidad de H2O Innovation, explica que el compromiso de la empresa con ser ‘Water Positive’ implica implementar prácticas que no solo reduzcan el consumo de agua y mejoren su calidad y disponibilidad, sino que también se apoyen en la incorporación de tecnologías para explotar nuevas fuentes de agua. El objetivo es lograr un impacto positivo en los ecosistemas acuáticos, asegurando que se conserve y restaure más agua de la que se utiliza o consume. Según Sturniolo, la comunidad científica mundial está de acuerdo en que la desalación y la regeneración de agua representan las alternativas más eficientes para colaborar con el ciclo natural del agua de manera sostenible.
Aunque actualmente las transacciones de compensación en esta iniciativa son limitadas, se anticipa que en un futuro cercano surgirá un mercado similar al de los créditos de carbono, pero enfocado en compensar la huella hídrica en lugar de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). La principal diferencia radica en que la compensación del uso del agua incorpora variables adicionales, como la comercialización del agua, la escasez hídrica, el transporte del recurso y los impactos sociales, económicos y medioambientales derivados de su gestión.
Desde WaterPositive.es, se enfatiza la importancia de adoptar un abanico de estrategias para alcanzar el estatus de «Water Positive» en el sector industrial. Entre estas estrategias se incluyen la restauración de cuencas hidrográficas, reforestación, captura de agua de lluvia, reparación de fugas en acueductos, y limpieza de ríos. Además, se resalta el papel crucial de tecnologías avanzadas como la desalación y la regeneración de agua, que ofrecen una fuente sostenible y renovable capaz de suministrar agua de manera constante. Estas soluciones tecnológicas se distinguen por su capacidad para proporcionar agua independientemente de las condiciones climáticas o cualquier variable externa, asegurando un flujo predecible y fiable para satisfacer las necesidades hídricas.
Este concepto, será uno de los que se tratará durante el Congreso ACADES 2024, encuentro donde se conversarán y discutirán estrategias para conseguir seguridad hídrica y adaptación al cambio climático. La instancia, que se desarrollará los días 20 y 21 de marzo en el Hotel Mandarín Oriental de Santiago, reunirá a ejecutivos, profesionales, técnicos, empresarios, emprendedores y líderes sociales y de opinión, donde compartirán sus conocimientos y experiencias a fin de analizar todas las alternativas que cuenta el país para incorporar nuevas fuentes de agua.
Equipo Prensa
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